Renovarse o no. Esa es la cuestión. Pero en ocasiones nos cuesta renovar nuestro hogar porque suele implicar el desembolso de grandes cantidades de dinero. Pero, ¿qué pensarías si te dijéramos que puedes darle a tu casa nuevos aires sin tener que gastarte mucho dinero? Solo hace falta agudizar el ingenio, la imaginación y ser creativos a la hora de darle un nuevo aspecto a nuestra vivienda. Por eso, en este libro de ideas queremos contarte cómo renovar los espacios gastando poco o nada de dinero. Buenas ideas, grandes cambios y poco gasto. Una ecuación que a todos nos gusta.
Una mano de pintura nunca viene mal y es una forma económica de darle nuevos aires a cualquier habitación. Tampoco hace falta que pintes todas las paredes. Con que cambies el color de una de ellas renovarás el espíritu de la estancia.
Aunque se trata de una idea sencilla, no es por ello menos efectiva. Y además la más económica, ya que solo tendrás que invertir parte de tu tiempo. Cambiar la orientación de los muebles puede transformar de forma radical la apariencia de una habitación sin necesidad de gastarse ni un solo céntimo.
Las plantas nos dan energía y crean un espacio más saludable y fresco. Por eso no está demás aprovechar el balcón o la terraza para colocar algunas. También puede hacerlo en interior. Elige aquellas que más te gusten y que mejor se adapten al lugar. Si eres de los que no presta mucha atención a las plantas, siempre puedes optar por aquellas que no necesitan demasiados cuidados y son capaces de vivir en cualquier ambiente.
Vale que no todo el mundo tiene la misma destreza para dibujar, pero seguro que tienes algún conocido al que se le da bien. Sino siempre puedes simular un dibujo colocando un vinilo en esa pared deslucida y monótona. Bastan con un diseño simple para cambiar por completo la apariencia de la habitación.
Probablemente tengas en tu casa algún espacio que no sepas que utilidad darle, como puede ser el hueco que hay debajo de las escaleras. En lugar de tenerlo desordenado o simplemente sin uso, intenta darle un nuevo uso y conviértelo así en un espacio funcional.
Una forma sencilla y económica de modificar visualmente la apariencia visual es cambiando la textura o el color de los cojines, las fundas o la alfombra. Con una inversión mínima podrás añadir un poco de color y calidez a cualquier rincón de tu hogar.
Cambiar el color de la mesita de noche, ponle unos nuevos tiradores a una cómoda, una mesa con un nuevo tablero… . Utiliza cualquier técnica que se te pueda ocurrir para modificar la apariencia de alguno de los muebles y conseguirás darle un nuevo estilo a la estancia que quieras modificar.
Si no quieres pintar o comprar muebles nuevos, algo tan sencillo como cambiar las cortinas puede suponer una gran transformación visual. Unas cortinas llamativas o que contrasten con el resto de la decoración harán que la habitación gane una nueva apariencia.
Otra opción para lograr un nuevo aspecto en cualquier habitación de tu vivienda es cambiar la iluminación. Pera ello puedes comprar una nueva lámpara o simplemente buscar una nueva ubicación para modificar su iluminación y el efecto de las sombras. Algo sencillo pero que puede resultar muy significativo.
En la actualidad existe una amplia variedad de lámparas y sistemas de iluminación. Consulta este libro de ideas para informarte más sobre el tema.
Para cambiar el aspecto de alguna de las habitaciones, no todo tiene que pasar por cambiar o añadir objetos. Ordenar y tirar todos aquellas cosas que no utilizamos desde hace tiempo o que se han estropeado con el paso del tiempo es también una forma de transformar el lugar. Así tendrás espacio para colocar nuevas piezas.
El cartón es un material económico, ecológico y, aunque parezca lo contrario, es increíblemente resistente. Además, es muy fácil de plegar y transportar. Renueva con cualquier dormitorio con muebles de cartón y conseguirás un espacio totalmente nuevo y original.